Un espacio donde aprenden a ser mayores
El cuarto de baño es una de las estancias de casa más transitadas por todos los miembros de la familia. Especialmente a primera hora de la mañana, cuando suele reinar el caos porque todos tenemos prisa para no llegar tarde ni al cole ni a trabajar. Para evitar accidentes o caídas, es importante que el cuarto de baño sea seguro para los niños.
Adecuar el baño para los peques de la casa es una prioridad para los padres, no sólo para evitar accidentes y caídas. También para proporcionarles un espacio donde puedan sentirse mayores y autónomos, donde puedan ir haciendo cosas solitos: lavarse la cara, cepillarse los dientes e incluso bañarse o ducharse!
BAÑERA Y DUCHA MÁS SEGURAS
La bañera y la ducha suele ser un espacio que preocupa a los padres, sobretodo por los resbalones. Dentro de la bañera o ducha, colocar las estanterías para los jabones o champús a una altura media facilitará que los niños puedan acceder sin problema. Así no se ponen de puntillas dentro de la bañera o la ducha y evitamos resbalones y caídas peligrosas.
Aunque parezca poco relevante; tener una alfombra de baño es muy importante. Salir de la ducha con los pies mojados y resbalar es uno de los sustos más comunes. Y no sólo para los peques, a los adultos también nos pasa. Así que con niños entrando y saliendo de la bañera, es imprescindible tener una alfombra para evitar estos resbalones inoportunos.
Los alzadores y taburetes son muy útiles para cuando los peques no alcanzan el lavabo. Quieren lavarse los dientes, peinarse… con un taburete llegarán sin problema al lavabo y ganarán en independencia y seguridad.
Y es que en algún momento del día casi todos los componentes de la familia coincidimos en el baño. Por eso es importante que sea una estancia cómoda y segura para todos. Un baño seguro para niños dará tranquilidad a los padres.