Cada vez pasamos más tiempo en nuestro hogar, lo que puede ser poco saludable si este no reúne ciertas condiciones que garanticen nuestra salud y bienestar. Por eso, hoy te traemos algunos tips para mejorar la habitabilidad de nuestra vivienda y lograr un hogar más sano y feliz siguiendo los consejos de la neurociencia.
1. Mejora las condiciones biológicas de tu hogar
Nuestro cerebro y nuestro cuerpo están diseñados para adaptarse a todo tipo de entornos y situaciones. Por eso, en casa, terminamos por acostumbramos a ciertas condiciones insalubres como el ambiente cargado, los olores fuertes, la humedad o la falta de una iluminación adecuada y suficiente. Sin embargo, detectar y solucionar estas carencias es fundamental para mejorar nuestra calidad de vida y nuestra salud.
2. Redecora tu hogar sin perder de vista tus objetivos
Piensa en la función que quieres darle a cada habitación y diséñala de modo que facilites el cumplimiento de ese propósito. Por ejemplo, si quieres que el salón sea un espacio donde la familia se reúna e interactúe, no pongas un único sofá alargado frente al televisor. Si en tu despacho necesitas concentración y motivación, incluye luminarias de espectro completo y cuida el orden de los elementos. También puedes usar formas ovaladas y notas de colores brillantes para favorecer tu atención y tu estimulación.
3. Favorece la entrada de la luz natural e ilumina tu hogar imitando el ciclo de la luz solar
Los beneficios de la luz solar sobre la mente y el cuerpo han sido sobradamente demostrados, por eso, potenciar la entrada de luz natural en casa, es un buen comienzo para sentirnos mejor en nuestro hogar. Puedes leer algunos consejos para sacarle el máximo provecho en este artículo de nuestro blog.
Por otra parte, al elegir luminarias, busca productos y sistemas que te ayuden a reproducir la evolución de luz solar en cada momento del día, ya que nuestro cuerpo se orienta en base a la luz del sol para acelerar o decelerar nuestro metabolismo. Puedes usar luz fría en las estancias que uses de día y luz cálida, preferiblemente indirecta, en las habitaciones que dediques al descanso. También puedes hacerte con bombillas LED regulables para ajustar la intensidad y la temperatura de color, como en el caso del aplique LED TEMPO II de Baho.
4. Da la bienvenida a las formas curvas
¿Sabías que el cerebro percibe las formar aristadas como peligrosas? Por eso, reacciona ante ellas poniendo en alerta a nuestro sistema nervioso autónomo. Por el contrario, las formas onduladas y orgánicas, propias de la naturaleza, son percibidas como más cercanas y amables, desencadenando un estado de relajación.
5. Elige colores que te sienten bien…¡literalmente!
Los colores de los que nos rodeamos inciden poderosamente en nuestro estado de ánimo, en nuestra energía y en nuestro confort: ¡tenlo en cuenta a la hora de decorar tus habitaciones!
6. Sigue los principios del diseño biofílico
Este estilo nace de la idea de que ciertos materiales, texturas, formas y colores pueden ayudarnos a convertir nuestro hogar en un lugar más natural, donde nos sintamos conectados con el entorno. Según la neurociencia, los espacios de diseño biofílico no solo nos hacen sentir más cómodos, sino que nos ayudan a reducir el estrés y nos aportan energía y positividad, ayudándonos también a cuidar nuestra salud física gracias al uso de materiales bioconstructivos libres de químicos tóxicos.
Por otra parte, varios estudios biológicos destacan que la socialización con otras especies de seres vivos, es tan importante para el correcto desarrollo de los humanos como el contacto con otras personas, por eso, es muy recomendable que nos rodeemos de plantas naturales.
7. La importancia de disfrutar de un campo visual amplio
Nuestro cerebro tiene la necesidad de contar con espacios visuales libres de obstáculos con, al menos, una profundidad de 30 metros. Si tu hogar te permite tener amplias vistas del exterior, distribúyelo y decóralo potenciando y dándole protagonismo a las ventanas.
8.Cuida la acústica de tu hogar.
La acústica es uno de los aspectos más descuidados de la decoración, sin embargo, el ruido y la reverberación inciden muy negativamente en nuestra salud y bienestar, y también en nuestra concentración y relajación. La decoración puede mejorar la acústica de nuestras habitaciones con la ayuda de textiles y el uso de materiales absorbentes del ruido como el corcho. Si te interesa este tema, puedes encontrar más consejos para mantener alejada la contaminación acústica, en este post de nuestro blog.